domingo, 15 de enero de 2012

La chica de Massachussets

Shalane Flanagan, ayer en Houston
La ganadora, durante la prueba
Los recuerdos de Pekín no dejan de asaltarme. Con cualquier excusa. Fue una de aquellas noches mágicas en el Estadio Olímpico cuando una chica muy pálida peleaba y peleaba por las medallas en la final de 10.000 metros. Al final su trabajo tuvo recompensa: se colgó el bronce olímpico con un crono de 30:22, récord estadounidense. Jamás había corrido un 10.000 hasta ese mismo año.
Shalane Flanagan ganó ayer los Trials de maratón en Houston (2h25' sin liebres). Es una atleta rebosante de genética. Su padre corrió el maratón en 2h18'. Pero su madre, Cheryl Bridges, tiene aún más maratón en su biografía. En el año 1971, época de valientes, de pioneras, de prohibiciones, terminó el Maratón de Culver City en 2h49:40. Récord del mundo.
A Flanagan, de 30 años, también  la vimos en una actuación espectacular el pasado año en el Mundial de cross de Punta Umbría. La chica de Massachussets (en sus años de instituto fue campeona nacional escolar de la milla con 4:46) se llevó el bronce, una rubia entre africanas, cuando muy pocos lo esperaban. Ayer en Houston demostró que puede subir al podio en Londres. No se la puede descartar jamás: es una luchadora tremenda.
Creo que Flanagan, quien se entrena desde hace tres años con Schumacher (el técnico rival de Alberto Salazar en Oregon) está dosificando muy bien su carrera atlética. Decidió debutar en maratón en 2010, ya con la vista en Londres. Se preparó con un colosal crono de 1h08' en media maratón y se estrenó por fin en Nueva York (noviembre 2010) siendo segunda con 2h28'.
Shalane no quiso tocar el maratón en 2011. Se mantuvo en conserva, como el atún. Pero ayer abrió la lata. Y brilló, en una competición pura, sin aditivos. Tengo muchas ganas de ver a esta atleta en las calles de Londres, en ese tremendo maratón olímpico en el que Paula Radcliffe concluirá, bien o mal, su leyenda.

1 comentario:

Unknown dijo...

ojalá volvamos a ver un par de atletas pálidas allí delante, en el maratón de los JJOO. Aunque me gustaría también que estuviera una morena nacional; la gran Alessandra!